Solo un loco podría despreciar un amigo o una persona que se tiene la sospecha que podría resultar ser llamado amigo. En la vida uno se cruza con tantas personas, es que no somos un planeta tan chiquito como Plutón, que cuando hay similitudes de gustos o preferencias es cuando se da inicio a lo que llamamos "un conocido". Todo el mundo no es un conocido. La cuarta parte o hasta menos sí. Es que los gustos son tan diversos que con ver la tele y que nos guste aquella banda que a todo mundo le guste se podría tener a muchos conocidos; pero, cuando esto se avecina con frecuencia: A esta persona la vez más seguido que solo un encuentro casual en una cafetería o en la universidad, es entonces cuando sientes que podría ser un amigo. Hablas más, intercambian ideas, salen a caminar juntos, cambian números y se agregan en las redes sociales. Haces demás cosas que sueles hacer con tus ya amigos, haber si hay algo de similitud. Te das cuenta que no son iguales a tus amigos, sino son todo lo contrario pero aún así te atrae su compañía, te agrada su forma de pensar. Amas como se expresa de temas que te resultaban absurdos y estúpidos. Cuando menos te das cuenta, esa persona es tu amigo. Pero a pesar de ello no quieres que sepa tus más íntimos sucesos, prefieres ir lento.
Sin embargo, un suceso lo cambia todo. La tristeza más absurda golpea tu vida y lloras en frente de esa persona. Ésta se preocupa, se enternece con tus lágrimas pero consternado no sabe la razón.
No indaga más por el respeto que tiene a la tristeza. Luego, sin más ni menos, te abraza y sientes que su abrazo te puede proteger hasta de un terremoto. Sientes que su calor te llena de fuerza para que esa tristeza no se apodere más de tu semblante. Lo abrazas y sientes que su cariño es sincero. Que su amistad vale más que, tal vez, ninguna otra. Te das cuenta que te has enamorado.
Al finalizar el día, él te besa y promete nunca más hacerte llorar. Cuando escuchas esto, te ríes por la tonta promesa y le dices: "Eres un idiota, también se llora de felicidad, como ahora."- haciendo una pausa- " Eres mi príncipe púrpura."
-SunnySun, con la mente en ti.